MONTERREY, (LIVIO ÁVILA / VANGUARDIA).- Vienen del polvo del desierto, de Las Vegas, Nevada, pero su música es la tormenta eléctrica que retumba en el silencio: The Killers, si se autonombran así, “los asesinos”, es porque matan cualquier rastro de silencio, incluso el silencio emocional, pues ellos arrasaron con los sentimientos de sus oyentes y tocaron las fibras más sensibles de Monterrey este martes (“¡Es nuestro martes!”, dijo Brandon Floweras), de sus 11 mil fanáticos que se rindieron ante un espectáculo único en la Arena Monterrey.
La escenografía tuvo un rayo con focos multicolores —muy parecido al icónico de David Bowie, un rayo que da portada al nuevo álbum de la banda, “Battle Born”—, y con este estandarte, los Killers hicieron su primera parada por el país mexicano, este martes a las 22:oo horas con 9 minutos, con un juego de luces, pirotecnia y mucha de su más emblemática música, creando una enérgica oda a la emoción y al baile.
Justo a esta hora y en este minuto, apareció Brandon Flowers a la vista de los regiomontanos y foráneos que se congregaron; el cuarteto no podía ser liderado mejor: Flowers, resplandeciente y carismático, salió con una sonrisa que no se le borraría del rostro y con la que cautivó en el primero de sus dos conciertos en Monterrey.
Su equipo: David Keuning a la guitarra, Mark Stoermer al bajo y Ronnie Vannuci en la batería, llegaron con una lluvia hipnótica: “Mr. Brightside”, una de sus más conocidas canciones y con la que dejaron claro que venían a complacer a todos.
“¡La Sultana del Norte!”, le gritó Flowers a Monterrey, y lo dijo en un español bien pronunciado: “Nosotros también los extrañamos”. Con “Spaceman” derrochó aun más sonido pues hizo corear a los miles de seguidores “¡Oh, oh, oh!”, la mayoría un público joven, de entre 17 a 30 años.
Su espectáculo mostró imágenes etéreas: desde nebulosas psicodélicas, estrellas como vistas durante un viaje espacial, o un cielo nublado y de azul intenso. “¡Estoy hablándole a México esta noche!”, dijo el vocalista.
La infaltable “Smile Like You Mean It” continuó con el espíritu derrochador, y vaya que los presentes sonreían como si lo sintieran, como dice la canción. Se alzaban las cervezas y volaban por los aires lluvia de esta bebida que arrojaron algunos en la euforia; un vaso amenazó con llegarle a Brandon, quien en algún momento mostró temor de que le cayera encima.
Y después siguió la nueva y melancólica “Here With Me”, cuyo videoclip dirigiera Tim Burton, y donde buscan hacerse los “posmodernos” con frases romático-tecnológicas como “No quiero tu imagen en mi celular, te quiero aquí conmigo”. Quizá a ellos no les guste tanto, porque no la terminaron de cantar para dar paso a “Bling”, de su segundo álbum “Sam’s Town”.
Un resplandor de pirotecnia y humo iluminó en “Miss Atomic Bomb”. Después “Human” fue otro momento épico: “¿Somos humanos o somos danzantes?” La pregunta más retórica y deliciosa de la noche.
Unos clásicos atómicos
Era imposible, teniendo celular con cámara, no grabar a The Killers y llevarse un momento del concierto en el bolsillo. Pero... lo más seguro es que los videos resultantes darán la impresión de haber sigo grabados por un epiléptico: era imposible estar inmóvil ante “For Reasons Unknown”, canción que hizo a todos aplaudir rítmicamente, bajo la orden de Flowers, quien, entallado en un chaleco y pantalones ceñidos, parecía más un modelo a punto de la pasarela; pero no, además de su canto, tocó el teclado.
Continuó “From Here on Out” de su nuevo álbum; y, luego, un homenaje al desierto: “Dustland”, a su tierra árida, porque “lo que pasa en Las Vegas se queda en Las Vegas”, dijo Brandon. La canción fue una de las más coreadas de la noche.
¿Pero cómo se irían sin leerle la mente a sus fanáticos? “Read My Mind” de “Sam’s Town”, siguió y los brazos se pusieron en alto con palmas y una ovación que cerró con el teclado de Flowers; la canción es ya un himno y de eso no quedó duda.
“Runaways” continuó, pero mayor fue la respuesta de la masa “killeriana” con “All These Things That I’ve Done”, con un clímax de confeti metálico que llovió sobre los cercanos al escenario, en una gran fiesta. Luego de cinco minutos de descanso, regresaron con “This is Your Life” y la no tan famosa “Jenny Was a Friend of Mine”, de su primer álbum “Hot Fuss”, pero sí conocidísima y coreadísima.
Y al final no podían irse sin interpretar “When You Where Young”, que conmovió a todos al recordar, como dijo Brandon, “nuestro primer disco que hicimos en 2004, el más exitoso y que llegó a todo el mundo”. La tormenta de casi dos horas traída por los matones del silencio se apagó al filo de las 00: 00 horas. Los celulares y el corazón se llevaron el recuerdo de unos una verdadera tormenta eléctrica.
Las más coreadas
- ‘Mr. Brightside’
- ‘Spaceman’
- ‘Dustland’
- ‘Read My Mind’
- ‘When You Were Young’
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